HISTORIA

Historia AlEste Bodega & Viñedos

Quienes nos visitan suelen sorprenderse al encontrar una bodega y un viñedo en Médanos. El motivo de la sorpresa radica en que es raro dar con una empresa vitivinícola por estas tierras, tan lejos de donde el conocimiento popular registra.

Durante muchos años regían disposiciones proteccionistas que prohibían producir uva  y consecuentemente vino, en las provincias de Buenos Aires y Entre Ríos. ​​

En Médanos hasta mediados de la década de 1930 se registraban 300 has de viñas, cultivadas por los inmigrantes que llegaron a colonizar estas tierras, de quienes los actuales habitantes descendemos.

Para dar una idea de magnitud, sólo en San Nicolás (noreste de la Provincia) debieron cerrar 33 bodegas. Se puede extrapolar esta experiencia al resto de la provincia. Fueron razones políticas que pesaron sobre los legisladores de entonces. Y fue así que la cuarta y la quinta provincia productoras de vinos fueron proscriptas para esta actividad.  Los argumentos que se tuvieron en consideración fueron que Mendoza, San Juan y otras provincias productoras veían dificultada la comercialización de sus vinos por la competencia de Buenos Aires y Entre Ríos.

Y bajo la suposición de que en éstas era posible diversificar las actividades productivas, se resolvió prohibir la producción y se exigió que en un período de 15 años se erradicara definitivamente la vitivinicultura.​

Médanos se encuentra en el sudoeste de la Provincia de Buenos Aires, inmersa en un clima semiárido, con tierras pobres en materia orgánica, donde las alternativas productivas son escasas. La vid fue y seguirá siendo uno de los pocos productos aptos por excelencia.

 

 

Nuestra primer experiencia

El 1 de diciembre del año 2000 iniciamos nuestra explotación. Ese día la Provincia de Buenos Aires rompió con 63 años de "abstemia".

Bodega AlEste es la primera manifestación de la vitivinicultura en Buenos Aires, en esta segunda etapa.

Al no disponer de información fiable del comportamiento de la vid en nuestro terroir debido a las seis décadas de prohibición, decidimos realizar una experiencia  implantando sobre una superficie de 1,5 hectáreas,  un ensayo que contemplaba 8 varietales: malbec, cabernet sauvignon, merlot, tannat, syrah, tempranillo y petit verdot como uvas tintas y chardonnay como uva blanca. Algunos de los varietales fueron importados directamente del vivero Mercier de Francia, en estacas a raíz desnuda.

Para llevar a cabo la experiencia y para aprender,  contratamos a una consultora  mendocina. Fue la primera de varias hasta encontrar las soluciones  a los problemas que plantea un nuevo terrorir. Así como nuestro vino tiene características propias, nuestro terroir también es diferente, por ese motivo nos llevó 8 años de trabajo, esfuerzo e inversión lograr los primeros vinos comerciales.

Con las uvas producidas de la experiencia inicial, en 2003 enviamos cien kilos de cada varietal al laboratorio que INTA tiene en Lujan de Cuyo, para que hiciesen los trabajos de micro-vinificación. Al cabo de unos meses recibimos los resultados analíticos junto con algunas botellas del vino producido con nuestras uvas.  Esta experiencia nos alentó para repetirlo en una escala mayor ya con fines comerciales.

 

 
 

Relato del fundador | AlEste

En junio de 2000, viajando en automóvil por el sur de Francia, haciendo el trayecto que va desde Barcelona al norte de Italia, con programa libre para tomar las pausas en las paradas que hicieran falta, salimos de la autopista A9 en Narbone, en busca de un hotel para pasar la noche del primero de junio.Por error, por desconocimiento del francés o por cuestiones del destino, en lugar de tomar hacia el centro de la ciudad,  nos dirigimos a una zona rural donde a la vuelta de un codo del camino nos enfrentó un cartel que indicaba "Hotel-Viñedo".

Habrá sido por el glamour del lugar, porque siempre fui vinófilo o simplemente por querer encontrar una actividad que llene vacíos, fue que concebí la idea de replicarlo en Médanos, mi pueblo.